sólo un apunte. Tuve la fortuna, amigo de la adolescencia mediante, de estar (participar) en el ensayo general de una obra en la que el trabajo de interpretación era magnífico, especialmente el de Francesc Lucchetti. La dirección es capaz de sostener una trama sin ningún conflicto en apariencia. Se trata de la vieja estructura edípica de presentar algo cuando el conflicto ya ha pasado, tipo drama analítico. Las pavesas del fuego.
Peroooooooo
me pregunto, quiero decir, aprovecho el blog como una ouija para preguntarme (o quejarme)a Pinter: ¿a quién se le ocurre regresar al hogar después de que Nora se fuera de la casa de muñecas?
No obstante, aunque no trague a Pinter, con Traición sí me quedo.
3 comentarios:
1. siempre he pensado que el heroísmo de Nora es más que discutible... pues creo que el verdadero heroísmo hubiera sido afrontar la situación y arreglarla, no salir por patas, pero bueno... es solo una opinión.
2. Pinter es el sucesor de Beckett... estas cosas se ven venir!!(una, que el tetro del absurdo la ha embaucado, y ahora no hay quien me saque de allí...)
nononono
Pinter,¡nooo¡
bueno, bueno, bueno, no sé. Nora es una mujer de su tiempo, no tiene más que una salida.
Ahora, que eso sí, ¿volver a casadepadresmaridos?, ¿paqué?
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