Las no conciliadas entendemos de torturas, inviernos, metales.
De bocas con paños mojados, del tendido eléctrico.
De los besos que duelen. De todo este humo. De aquel amor. De toda esa
cháchara. Que los pillos decían "yo quiero moler" y parecía que
había que abrir el molino a cualquier hora.
Aprendemos a meterles los dedos en los ojos.
Unas detrás de otras comenzamos a arder.
Tr. del Gallego
Xiana Arias Rego
(inédito)
![]() |
| Sofia Jack |

1 comentario:
Me gusta, Ana, mucho.
Publicar un comentario